lunes, 16 de agosto de 2010

TACITURNO

Una taza de café y un cigarrillo parece no resolver nada; no hay "relajación" ni quietud en éste, nuestro nuevo mundo. Pienso en todo lo que pasa en el mundo, y siento latidos fuertes en mi corazón. No hay rastro de humanidad; ya no existe la ética ni la moral; y no menciono éstas dos por ser redundante, mas bien quiero plasmar éste pleonasmo para que conste, que aunque básicamente son dos palabras que significan lo mismo, mi desilusión es tal que me obliga a usar las dos.

Saramago, en su insurrección ética (2) me ha hecho pensar lo mucho que el mundo necesita ayuda, y no de nosotros mismos, sino de la verdadera razón y de lo más básico que debe tener todo humano, así como cada animal lo tiene y lo utiliza a diario, pero que al parecer el humano ha descartado por completo: el instinto.

Es que simplemente me parece ilógico todo lo que el ser humano hace hoy día. Nadie piensa, nadie analiza. Por poner un ejemplo sencillo, hoy día cuando un adolescente llega a la edad de tomar la decisión de qué debe estudiar, eligen profesiones en las cuales puedan ganar "mucho dinero". ¿De cuándo a acá el mundo se trata de hacer dinero? Bueno, supongo que soy yo el que está mal, y que sí, definitivamente todos estudiamos para ganar dinero. Ya nadie estudia por gusto, nadie estudia para componer algo a la humanidad; nos conformamos con el hecho de que tuvimos algún que otro "sabio" en el pasado que descubrió alguna cosa; nos conformamos con los hechos, pero no vamos más allá de lo que llaman "razón" hoy día. Nadie recuerda que la misma "razón" del ser humano es lo que nos ha llevado a guerras, a esclavitud, a la opresión, al terrorismo... la verdadera razón se encuentra en nuestro instinto y no en lo que pensamos.

Ya nadie estudia para crear un mundo mejor; nadie estudia para componer algo en la sociedad, sólo estudian para ganar dinero. El dinero maneja el mundo y nadie es tan valiente como para dejar de aferrarse de él. Estudiantes se gradúan pensando que compondrán algo en la sociedad sin darse cuenta que están siendo utilizados por un mecanismo de esclavitud llamado "democracia". Una democracia que sólo existe en fábulas y libros de historia, pero que sin embargo, esa democracia a lo único que nos lleva es a elegir nuestro próximo dictador. ¿Tú propones leyes? ¿Luchas por las leyes aprobadas y no aprobadas? ¿Te han hecho caso? Entonces vives en una dictadura.

Estudiantes que se gradúan pensando que tendrán trabajos seguros, pero cuando vienen a la realidad, tienen que salir corriendo a otros países porque su profesión, en la que le dijeron que iba a generar mucho dinero, está completamente saturada; tanto así que no les pagan lo que deberían porque hay otros que se subyugan por el salario mínimo.

Vivimos en una sociedad explotadora en donde el ser humano es sólo una bacteria que se apodera de todo; va explotando sección por sección hasta que al final no quede nada. La Tierra paga por ello; los animales pagan por ello y muchas otras especies, ya extintas, han pagado por ello. Futuras especies seguirán pagando ese precio, sólo porque el ser humano no tiene la capacidad de darle el espacio a todas las artes, a todas las profesiones, especies, pensamientos, religiones, creencias... al final quedaremos todos pensando en lo que perdimos. Así como me siento yo, que llego a mi casa de mi esclavitud diaria, me siento en mi balcón, tal vez con un cigarrillo en mi mano y una copa de vino, mirando las estrellas, a ver si alguna responde a alguna de mis oraciones; a ver si Dios se llena de misericordia porque ésta especie está matando todo lo que se le pone al paso. Me levanto y doy un último suspiro; cierro la puerta. Me acuesto en mi cama a mirar el techo y sigo pensando, con preocupación, en el mundo. Pero no hay nadie que escuche mis pensamientos; nadie es digno, ni tan si quiera de admitir que estamos mal. Nadie es digno de pensar por sí mismo. Mi corazón se acelera pero pronto se tranquiliza cuando llega la única calma que puedo tener: sueño.


Safe Creative #1008167065657

2 comentarios:

  1. Ya nadie piensa en el bien común. Es mas bien el que puedo sacarles a otro sin tener que hacer el mínimo esfuerzo. Es que hoy día mientras te tomas el tiempo para pensar en otros o para aportar o ayudar a la sociedad, viene un(a) cabrón(a) de la vida a quitarte lo que tengas simplemente por no estar concentrado en lo que todos entienden que es la prioridad, el Yo. Yo primero, yo segundo, yo tercero y los demás jódanse. Si entiendo que no podemos vivir en un mundo de Mary Poppins, pero cada cual esta tan concentrado en resolver sus vidas o tal vez como volverse mas estúpidamente rico, que nadie mira hacia el lado a ver la necesidad del otro. Se que nadie quiere que lo cojan de pendejo, pero de vez en cuando se debe no solo mirar al del lado si no también darle la mano.

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  2. ES QUE A LAS PERSONAS HAY QUE ORIENTARLAS PRIMERO Y DEFINIRLES LO QUE ES EL INSTINTO... QUE ES COMO UNA BASE DE DATOS PRE PROGRAMADA EN NUESTRO SISTEMA....
    SOY FIEL AL MIO.... MI ALMA,MI SISTEMA, MI SER ,SON REGIDOS POR EL MIO....
    CLARO, RESULTA EN UN 50%, PORQUE EN CADA SITUACION DE LA VIDA UN 50% ES REMITENTE Y UN 50% ES DESTINATARIO..... Y SI EL OTRO 50% NO DEJA BROTAR SU INSTINTO Y SOLO USA LA RAZON SIEMPRE AL FINAL HAY UN PERDEDOR... O DOS.....

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