miércoles, 29 de septiembre de 2010

LOS RICOS, RICOS SERÁN Y LOS POBRES JODÍOS ESTARÁN

Hoy estuve leyendo un artículo titulado "El cabildeo", escrito por Fufi Santori en su blog Pasaporte Boricua, en la página del Nuevo Día. Hasta hoy, honestamente yo no sabía nada sobre este señor. Luego de leer su biografía, automáticamente se hizo mi héroe, ya que una parte lee como sigue:
En 1993 decidió optar por otra forma de lucha y renunció a la ciudadanía de los Estados Unidos organizando un movimiento libertador que en noviembre de ese año repartió unos 400 pasaportes boricuas a renunciantes que se reunieron en el Teatro Liberty de Quebradillas.
Bueno, no es como que mi "héroe" literalmente, pero no hay duda que renunciar a la ciudadanía americana es un acto digno de admirar por una persona como yo.

Volviendo al tema, cuando leí éste artículo quedé impresionado, ya que Santori tilda a los políticos (tal vez no a todos pero a la mayoría) de inmorales y corruptos que llevan a cabo una práctica 'legalizada': El Cabildeo. Un cabildero (lobbyist en inglés), originalmente se le conocía por esperar a un político en el lobby de un parlamento con intención de influir en sus votos. Actualmente, según Santori, un profesional en el cabildeo es un intermediario entre intereses privados y servidores públicos (legisladores, senadores, jefes de agencias, etc.) que busca favores para sus clientes, que están dispuestos a 'dar' para recibir un favor a cambio. "Favores y recompensas millonarias", según Santori.

Sabemos que todo eso es cierto, y sabemos que mientras esos 'cabilderos' sirven como intermediarios, la mayor parte de la población, los obreros y trabajadores, seguimos con un rumbo que parece no tener fin. Seguimos trabajando para esas agencias privadas y gubernamentales que siguen tomando decisiones que favorecen a todos menos al pueblo. Votamos 'democráticamente' por representantes, legisladores y políticos que creémos que nos ayudarán, mas sin embargo ellos siguen en esos puestos durante cuatro años, sin cumplir las promesas que hicieron en sus campañas y legislando leyes para beneficio propio o de sus allegados. Poco a poco seguirán legislando leyes que beneficien al patrono y no al empleado. Se está hablando de quitar los bonos navideños o disminuírlos, entre muchos otros beneficios que tiene el empleado que también quieren quitar. Nuestros votos en las elecciones no sirven de nada. Votamos por partidos o por elección de cada electo sin ninguna diferencia en nuestro gobierno... bueno, sí hay diferencias: cada gobierno oprime más al pueblo que el pasado. No importan partidos o candidatos, ninguno hace la diferencia.

En parte, también creo que es culpa nuestra. Es nuestra culpa porque nosotros los pusimos ahí. Es nuestra culpa porque nosotros no estamos dispuestos a pelear por nuestros derechos. Es nuestra culpa porque en vez de esforzarnos y trabajar para un Puerto Rico mejor, nos conformamos con mantenernos callados, como buenos obreros y silenciar nuestro pensamiento. Nos conformamos con irnos fuera de Puerto Rico para buscar un 'mejor futuro' para nosotros mismos. ¿Y qué pasa con nuestros hermanos que quedan en Puerto Rico? ¿Qué hay con su futuro?

Tal vez no es hoy, ni mañana, ni pasado mañana... pero un día tendremos que luchar por nuestros derechos, y no sólo porque queremos, sino porque tendremos que hacerlo. Un día no tendremos otra opción que luchar contra la tiranía. Ese día habrán muchos muertos. No tenemos que esperar a eso, pero parece que nos hacemos los sordos, los ciegos y los mudos.

Fuentes:


Safe Creative #1009297460299

6 comentarios:

  1. Eso es así. Nos quejamos y nos quejamos y no hacemos nada. Me incluyo porque aunque escribo del tema, no creo que estoy haciendo nada. Sigo siendo empleado porque si no, no puedo pagar mis deudas y me llevan preso. Injusticia por todos lados.

    ResponderEliminar
  2. El discurso del fetiche de bienes que viene atado a la ideología neoliberal fue un presagio marxista. Ya no se puede escindir de nuestra condición socio-política. Todo se ha mecanizado, por lo tanto todo es más fácil de cuantificar. Lo que es más fácil de cuantificar, es más fácil asignarle un valor capital (dinero).

    Muchos errores históricos han pasado sin corrección por que se ha pensado que el ejercicio democrático es digno de personas que no saben votar y piensan con la barriga y se alimentan de dinero.

    El sistema hegemónico actual favorece todas las vías para desmantelar una de las pocas herramientas de emancipación que tiene la clase trabajadora, la educación.

    Mientras el pueblo siga ignoto a los discursos y narrativas que pueden ser la alternativa, seguirá votando por personas que compartan sus propias concepciones, es un círculo vicioso.

    ResponderEliminar
  3. Eso es asi. El sistema lo crearon asi por una razon. Saludos.

    ResponderEliminar
  4. Darko, creo que Fufi fue el primer puertorriqueño que renuncio a la ciudadania americana.

    Dices que no estas haciendo nada, creeme, el hecho de que lo estas escribiendo significa que estas creando conciencia. Por lo menos estas aportando tu granito de arena.

    Y si es cierto, los ricos se hacen ricos mientras los pobres continuamos chavaos. Saludos.

    http://endoftheamericandream.com/archives/16-signs-that-the-rich-are-getting-richer-and-the-poor-are-getting-poorer

    ResponderEliminar
  5. Hay una lucha de clases. Las clases media y baja están a merced de lo que decidan los de la alta pues son los que manipulan los gobiernos. Votar con la barriga es lo que nos tiene así cuando votemos con la mente comenzaremos a echar pa' lante. ¿Cuando serà eso?

    Adelante y éxito.

    ResponderEliminar
  6. Kofla: Muchas gracias. A veces trato de coger como 'consuelo' eso de que por lo menos escribo lo que pienso, pero siento que no es suficiente.

    Prometeo: Pensar con la barriga... ¡Priceless! Saludos, amigo.

    ResponderEliminar