lunes, 26 de octubre de 2009

RELATO: DE VUELTA AL VIAJE Y A LA PERSE DEL OVNI

Ese fin de semana de octubre 17… Ese lugar alejado, donde vimos monos corriendo, un pastizal grande frente a la casa de madera, y una playa a 10 minutos caminando. Para mi, una de las mejores experiencias hasta ahora.

Todo comenzó con una planificación bien rápida que hicimos. Mi banda tenia que tocar en Mayagüez, y esta fue la conversación que tuvimos, más o menos:

Yo: Loco vamos a tocar en Mayagüez.
G-Man: ¿en serio mano?
Yo: Si mano, tenemos que ir.
G-Man: Pues dale, yo me tiro.
Yo: Cabrón, yo me voy a quedar por allá. Vamos a recoger $30 pesos por persona pa’ pagar un sitio y quedarnos. Va a estar cabrón porque el sitio es en Combate, la playa es a 10 minutos caminando y nos van a cobrar $150 por quedarnos. Lo demás que recojamos es pa’ gasolina y hacer una comprita. Si, porque yo ni pa’ la pinga me tiro pa’ allá pa’ estar un día na mas.
G-Man: Dale loco, yo me apunto. Estoy pelao’ pero deja ver que hago.

(Todos los que se iban a quedar son unos cabrones porque se cantan de pelao’s pero no tienen que pagar una hipoteca. Pendejos que son, yo también estoy pelo so mamalones. Anyways, eso se lo dije a ellos pa’ que no fueran mazetas y fueran. Ayudo bastante.)

La cuestión es que recogimos los chavos y estábamos bien pompiaos por que llegara ese fin de semana. Unos cuantos se rajaron pero fuimos los que teníamos que ir. Cuando íbamos de camino, como siempre íbamos tripiándonos unos a otros, como buenos hermanitos en Cristo que somos. Nos paramos a comer y después en un Walgreens pa’ los monchis. Ligamos pa’l de empleadas de Walgreens y lo seguimos. Cuando llegamos había una oscuridad bien encabroná. Estuvimos alumbrando con los focos de mi guagua el lugar para encontrar los “breikers” de la luz y la llave de paso de agua. Estuvimos así aproximadamente como 10 minutos porque la luz de mi guagua esta bien tecata, casi ni alumbra; si, ajá, culpamos a la luz pero los morones fuimos nosotros que estábamos buscando en el lugar contrario. Después que encontramos todo fuimos a la casa. Una casita de madera. Subo los escalones y veo dos puertas de frente y una a mi izquierda. No sabía por que había tres puertas. Ví otra un poco mas alejada, al lado de un billar que había al lado derecho de la casa (todo esto al aire libre, estoy en el balcón, el billar esta en una plantita un poquito mas baja, pero en el mismo lugar, al aire libre) y rápido supe que era el baño, ya que me habían dicho que el baño quedaba fuera. Cuando abrimos las dos puertas que había de frente supe por qué eran puertas separadas. Esa era toda la casa, las puertas eran los cuartos, y la puerta que quedaba a mano izquierda (la tercera puerta) era la cocina. Yo le dije a mi esposa: “¿ya?, ¿ésta es toda la casa?” Ella me dijo: “sí nene, ¿que mas quieres? Tío me había dicho que era chiquita y yo te lo había dicho.” Me quede callado y entre al cuarto. Comenzamos a desempacar. Cuando terminamos destapamos el billar y empezamos a jugar y a beber. Tripiamos bien exageradamente demente y brutal, y estuvimos tripiando y bebiendo hasta que vimos el amanecer. Me emborrache tan y tan cabron que ni recuerdo muchas cosas de las que dije e hice. Menos mal que grabamos como 8 videos documentando todo para luego reírnos. Los videos son R y bastante personales así que no los subimos a YouTube para nada, aunque yo dije que los subieran porque no tienen nada de malo, pero los demás no quisieron. La cuestión es que nos disfrutamos esa noche como no tienen idea. Al otro día nos levantamos fresquesitos, ninguno con resaca (por lo menos yo no se lo que es eso, a mi nunca me da); desayunamos y después nos empezamos a preparar para irnos a tocar por la noche. Allí se metió uno de mis panas con su novia. Esos cabrones se “bañaban” de cada tres horas yo creo. La cuestión no es que no se “bañen”, es que cada “bañaíta” que se daban duraba como 1 hora y uno cagándose y meándose afuera del baño esperando a que ellos salieran y no acababan con sus poca-vergüenzas. Imagínense, acaban de descubrir que es mejor no ser virgen, ¿qué podíamos esperar? Bueno, después de toda esa odisea, pudimos salir de la casa al Mayagüez Mall a encontrarnos con otra gente que iba pa’l show y a comernos algo. Después salimos pa’l show y nos encontramos con mas gente, hablamos, jugamos billar, bebimos (agua), ví gente metiéndose cantazos a to’ lo que da y yo riéndome en una esquina. Me encontré con gente a la que nunca había visto, solo por MySpace o porque hablábamos por msn para poder coordinar cosas de los shows y al fin pude conocer a esa gente en persona. Después de un rato, no se por qué, pero supe que mi banda no tocaría esa noche. Efectivamente, no pudimos tocar por problemas con el dueño del local y además se formo una pelea por “líos de falda”. Anyways, me fui contentito porque tenía ganas de irme pero medio badtripiao’ por no poder tocar y ganar la competencia del mejor mosh pit. Nos fuimos directito pa’ la casa, pero esa noche todos estábamos tan explotaos de la noche anterior y de estar cargando cosas que no hicimos mucho. Solo estuvimos allí hablando un rato y tripiando y después todos se fueron a dormir… Eso creía yo. Después de un rato de estar en mi cuarto, salgo del cuarto y entro al otro cuarto, me encuentro a los únicos dos hombres que estaban allí sin pareja, los dos dormidos. ¡Maricones!, pensé yo. Tengo que tener un poco de paciencia con ellos porque son demasiado… Vamos a dejarlo ahí. La cosa es que digo, diache si fuera adicto este seria un buen momento para fumarme un fili, pero lamentablemente ni tengo ni soy adicto. De todos modos, me senté en ese balcón a mirar estrellas. Parece que el efecto del alcohol todavía estaba en mi sangre porque me sentía bien persiao. Tenia un muffin en mi mano, y un jugo y estaba mirando pa’ todos lados. De momento pensé que podía llegar un I-Ti de esos de los del relato de La perse-cusión de Fantaúsi, pero gracias a Dios no llego ninguno. Eso si, en serio, estaba bien persiao con esa pendejá’ porque me habían dicho que por allí se veían OVNIS y esas cosas. Con to’ y eso como que me quede con ganas de ver algo. Solo ví estrellas, un montón de estrellas. En ese momento me sentí bien feliz de estar ahí; tanto que quería quedarme.

Al otro día nos levantamos, desayunamos y nos preparamos pa’ ir pa’ la playa. Nos fuimos pa’ la playa a pié y era súper brutal de linda la playa esa. Lo único que no me gusto es que tenía como babote dentro del agua, pero tampoco era mucho, era arena normal, un poquito más pegajosa. Anyways, disfrutamos un montón y nos fuimos en unos viajes bien asquerosos, como siempre.

Luego de todo eso, de haber comido hot dogs, de haber visto monos corriendo y nosotros mirándolos como si fueran de otro planeta (imaginándonos que tal vez en su mente los monos nos estaban tripiando por jíbaros, o tal vez que venga un mono y se nos parara al lado y nos dijera: "¿que miras cabrón?, ¿tengo cara de mono yo?"); bebimos como dementes y dijimos muchas cosas incoherentes. Después de todo eso, nos fuimos. Miramos la casita de madera con nostalgia y todos deseamos poder quedarnos ahí.

De vuelta al viaje y a la perse de que un ovni estuviese cerca mío, cuando me despejé la mente en ese balconcito donde pude ver a dos durmiendo en su cuarto, oír a uno bañándose con una y creyéndose que nadie los escuchaba; y otro con su novia en la cocina haciéndoles caso a la lujuria y al hambre, me puse a pensar profundamente en la vida. Me puse a filosofar en mi mente y a oír música clásica (todo dentro de mi mente, hasta la música porque soy bastante imaginativo), descubrí que todos en este mundo tenemos muchas cosas innecesarias. ¿Innecesarias?, pues sí, desde tu casa hasta tu televisor. En ese lugar, donde pase uno de los fines de semana más brutales de toda mi vida (no conté todo lo que paso por si acaso) no ví televisor, bueno, había uno como de 15 pulgadas (era como el mío pero en televisor) y una radio que la mantuvimos todo el tiempo en una emisora donde solo daban Jazz y Salsa de la buena (vieja). No teníamos internet, fuera de mi iPhone, obviamente, pero yo casi no lo uso para eso, y anyways, aunque lo hubiésemos tenido, no lo hubiésemos hecho caso, porque nos entretuvimos tanto solo jugando billar, mirándonos, tripiándonos, haciendo estupideces, que no necesitábamos nada de eso. Me dí cuenta que una casa grande no sirve de nada si no tienes con que llenar los espacios. Me dí cuenta que un carro caro no vale de nada cuando tienes pies y puedes caminar; o por lo menos para ir lejos tienes un medio de transportación seguro, no necesariamente un Lexus, BMW, o Mercedes, con una simple Dodge Caravan del 1994 te da y te sobra pa’ irte con tus 5 panas a janguiar y pasar un fin de semana inolvidable. Me dí cuenta que malgastamos en lujos que ni siquiera merecemos. Me dí cuenta que para poder disfrutar de la vida, solo hay que tenerse a uno mismo en los 5 sentidos aunque se te agudice alguno que otro por el alcohol en tu sangre, pero estas tu, y gente con quien pasarla. La sociedad nos venden unos estilos de vida que lamentablemente nosotros como seres humanos no podemos pagar, y mucho menos DEBEMOS pagarlos, porque son cosas innecesarias. Las corporaciones abusan de su poder, nos hacen creer que NECESITAMOS cosas cuando en realidad no son necesarias. Nos ponen días en los que DEBEMOS ir al shopping a comprar un regalo, y ¡ay! de aquel que se le atreva olvidarse de comprar un regalo, que toda la familia lo mira mal. Yo siempre he sabido que tengo algo de anti-establishment en mi sistema, pero ahora me di cuenta que no es algo… Soy totalmente anti-establishment.

Esta historia larga solo demuestra lo que digo. No necesitamos una casa con piscina, que aunque la hubiésemos podido tener, porque íbamos para una casa así, pero terminamos en esa, y ninguno la cambiamos por una casa con piscina, una casa grande. Obvio, esa casa no es de nosotros… Ojalá fuera mía. En un futuro, como meta, quiero vivir en un lugar así. Sencillo.

7 comentarios:

  1. 2 cosas

    1. Eso esta cabron quiero tirarme una vacacioncita asi pa vacilar, como dijiste las mierdas meteriales no sirven para nada. Por algo me quiero ir de camping!!! Entre otras cosas eso de la ducha yo lo hago.. si no pues me voy a dar una "vuelta" jaja.. creeme(segun lo que he leido) mi novia y tu esposa se parecen mucho. Despues pienso que pal de blogueros deben hacer lo mismo...

    2. Pa fumar no hay que ser adicto pa'... yo fumo y no soy adicto ^_^, solo un punto ahi en que fallaste...

    ResponderEliminar
  2. si mano esas cosas hay q hacerlas. no les quise decir tecatos a los q fuman... mala mia no fue intencion ofender. es lo mismo que el alcohol, pienso yo. yo bebo, casi nunca en verdad, pero bebo de vez en cuando, y beber no me hace un borrachon. gracias por leer mano!!!

    ResponderEliminar
  3. No te preocupes, se me olvido decir que una ves mi hermanastro me desperto a las 3am porque habia un ovni en el cielo, termino siendo una de las estrellas esas que cambian de color y el estar arrebatau con cojones.

    Tecato es quien tiene un vicio inmenso y se puya... Adicto es cualquiera a cualquier substancia, de todas formas uno puede beber, fumar, tomar pastillas o meterse perico no siendo adicto... solo bebo y fumo by the way...

    ResponderEliminar
  4. jajaja que brutal mano, me gusto eso de los ovnis y los monos, hasta yo así en un lugar desconocido me pondría a pensar cosas extranas, que hay un jason o freddy krugger por ahí

    Saludos

    ResponderEliminar
  5. jejejeje! si mano, saludos a ti tambien!

    ResponderEliminar
  6. jaja! demasiá. Aveces es buena la desconexion porque como que te purifica la mente, te saca de la rutina, que nitido que mencionaste a mi blog!

    ResponderEliminar
  7. en verdad que si... esa desconexion que tuve hubiese querido que hubiese sido siempre pero hay q volver a la rutina del trabajo... maldita sociedad q obliga a uno a hacer esas cosas. yo creo q seria mejor conseguirme una finquita, sembrar y comer de ahi y vivir de eso mano.

    ResponderEliminar