miércoles, 28 de septiembre de 2011

LITIO

De momento el litio corre mis venas.

Una cosa no me explico.
Un jíbaro que ni hablar sabe
Y aquí estoy, medio perdío en la oscuridad.
Medio encerrao en mi andar,
Medio loco en mi subconsciente.

Y ni la lluvia sabe que me moja.
Ni el sol sabe que me ilumina.
Ni las estrellas saben que brillan
Pues con mi voz desaparecen todas.

Hoy ni un gancho me he bebío,
Ni una cachá de esas que me hacen pensar;
Ni un pensamiento que me haga reaccionar…
Entiendo yo me llevaría al delirio.

Pero aquí vivo, aquí sueño.
En este y otros lugares en mi mente constantes,
Viví y vivo, sin mirar adelante.
Adelante: ¿pa' qué?, si hoy no termino.

Aquí vivo y aquí muero.
No hay Dios que me saque este orgullo
De mi patria, mi hogar, mi terruño;
Me vaciaré hasta el eterno vuelo.

Pero el litio sigue por mis venas.
Esa densidad más ligera que el agua
Encadena mi cuerpo y libera mi alma
Hasta que se llene de sangre esta acera.

viernes, 9 de septiembre de 2011

¿QUIÉN MANEJA TU VIDA?

¿Para qué nos quejamos de lo mal que está el mundo? Entiendo un desahogo, una crítica social y sobre todo, el derecho a la libre expresión; poder decir lo que realmente quieras decir. Pero la libre expresión es una cosa y la indiferencia que nos posee al ver las cosas que pasan en el mundo, eso es otra cosa.

He visto gente culpar a Dios por la pobreza, o preguntar en tono de sarcasmo: "¿dónde está Dios ahora?", lo cual me lleva a una sola respuesta: ¿qué haces tú para luchar en contra de las injusticias, la pobreza, el hambre, etc.? Entiendo el punto del sarcasmo; lo que no entiendo es cómo es que nos atrevemos a echarle la culpa a algo "inexistente" pudiendo hacer algo por ello.

El ser humano es demasiado complejo para mi, supongo. Simplemente no entiendo cómo podemos dejar que las cosas que nos afectan de manera negativa sigan surgiendo y nosotros solamente nos quedemos ahí observando y con un sentimiento de indiferencia para muchos, e impotencia para los que realmente nos importa algo. Nosotros somos la mayoría. No dejemos que una minoría maneje nuestras vidas.